El verano es una estación mágica que evoca una imagen idílica y universal: días soleados, playas infinitas y momentos de descanso. Pero, ¿sabías que hay palabras en diferentes idiomas que encapsulan perfectamente esta sensación, y que no tienen una traducción exacta al español? En este artículo, te llevaremos de viaje por varios rincones del mundo para descubrir algunas de estas joyas lingüísticas veraniegas que no tienen equivalente en nuestro idioma.
¿Empezamos?
«Lagom» (Suecia): el equilibrio perfecto entre disfrutar y no excederse
Empezamos nuestro viaje en Suecia, donde la palabra «lagom» captura un concepto clave de la vida sueca: ni demasiado, ni muy poco, sino justo lo necesario.
En los días largos de verano, donde el tiempo parece detenerse, el «lagom» cobra un significado especial. Imagina un día cálido en el que decides ir de pícnic con tus amigos. Preparas la comida justa para todos, traes bebidas suficientes para refrescarte, pero sin pasarte. El ambiente es relajado, sin excesos, y te sientes en completa armonía con la naturaleza y con quienes te rodean. En esencia, «lagom» es exactamente eso.
«Hanami» (Japón): el arte de disfrutar la naturaleza efímera
Nos trasladamos ahora a Japón, donde la palabra «hanami» describe una tradición tan bella como fugaz. Aunque el «hanami» es más conocido por la contemplación de los cerezos en flor durante la primavera, su espíritu continúa en verano con la observación de otros paisajes naturales. Esta palabra encapsula el acto de apreciar la belleza efímera de la naturaleza.
Durante el verano, los japoneses disfrutan de «hanami» de una manera diferente: observando los lirios, los fuegos artificiales sobre el río y las noches estrelladas. «Hanami» no solo es un momento de contemplación, sino una oportunidad para reconectar con la naturaleza, tomar una pausa en la vida acelerada y disfrutar del aquí y el ahora.
«Gezelligheid» (Países Bajos): la calidez de los momentos compartidos
Seguimos nuestro recorrido en los Países Bajos, donde encontramos la palabra «gezelligheid». Esta palabra cobra vida en los largos días de verano, cuando las terrazas se llenan de gente, las barbacoas se encienden y las risas resuenan en el aire. «Gezelligheid» describe esa sensación de calidez, comodidad y buena compañía que se experimenta cuando estás rodeado de amigos y familiares.
«Gezelligheid» es el placer de estar juntos, disfrutando de la sencillez de la vida. ¿Y qué mejor que el verano para disfrutar de esa sensación?
«Sobremesa» (España): el noble arte del verano
Y no podemos olvidar nuestra propia palabra intraducible, «sobremesa»; ese momento, después de una comida, en el que nadie tiene prisa por levantarse de la mesa. Las conversaciones fluyen, el café se sirve, y la vida parece cobrar un sentido diferente, más sencillo y amable.
Durante el verano, la «sobremesa» se alarga aún más, especialmente en esos días calurosos en los que las comidas se hacen al aire libre. Es un tiempo para desconectar, compartir historias y simplemente disfrutar de la compañía sin el reloj marcando la próxima obligación. La «sobremesa» es un reflejo del carácter relajado y social de nuestra cultura, donde el valor de las relaciones humanas supera cualquier otra preocupación.
Estas son solo algunas de las palabras que hemos elegido para capturar sentimientos tan propios del verano, que también nos ofrecen una ventana a las culturas que las han creado. Palabras que nos recuerdan que el verano no es solo una estación, sino una experiencia cultural que se vive de manera única en cada rincón del mundo.
Así que la próxima vez que disfrutes de un momento veraniego especial, piensa en cómo podrías describirlo con una de estas palabras… o quizás, inventar una nueva que capture la esencia de tu propia experiencia.
Y, como siempre, si necesitas más información sobre nuestra empresa o tienes preguntas sobre nuestros servicios, no dudes en contactarnos a través de Facebook, Twitter, LinkedIn, o déjanos un mensaje en nuestro formulario.
Te ayudaremos en todo lo que podamos.
¡Gracias por leernos!